El abrazo entre el técnico Abel Alves y su estratega, Juan Román Riquelme, mostró la alegría y el desahogo de Boca luego de victoria ante River. Con esa fuerza de voluntad y con esa garra Boca encaró el partido de principio a fin, fue más que su rival y ganó el partido con justicia. Sustentó su rendimiento en un buen nivel de sus mediocampistas, especialmente de Méndez, y encontró en el chileno Gary Medel un héroe impensado, que con dos goles le dio la victoria. No le alcanza al xeneize para prenderse en la tabla, pero sí para encarar el futuro con mayor optimismo y tranquilidad.
Tras el retiro de lo miles de papelitos, que demoraron el comienzo del encuentro por 10 minutos, Boca fue más en la primera etapa y encontró el gol tras una falta infantil de Ahumada, un tiro libre de Riquelme y la punta del botín de Medel, que empujó la pelota al fondo de red. Pocas llegadas y mucha fricción era lo que mostraba el clásico, como un espejo del bajo nivel con el que llegaban los equipos. Boca al menos dominó la pelota y el terreno, pero River intentó sin suerte aprovechar los espacios que dejaba el xeneize. La única chance que tuvo en los pies de Funes Mori terminó con un tiro suave a las manos del arquero García.
En la segunda mitad, el partido ganó en espacios y mostró más llegadas. A los 3 minutos, Boca aumentó la diferencia tras un desborde de Monzón, un pase sin tocar la pelota de Gaitán y un remate de Medel, que llegó desde atrás para superar a Vega. River se adelantó en el campo y dispuso de algunas chances, con Canales, Gallardo y nuevamente Funes Mori, pero no tuvo precisión. Este equipo de Astrada luce oxidado, con poco juego en el centro del campo y poca frescura para desequilibrar en el área rival. Tan poco pesaron sus atacantes que ni siquiera lograron molestar a una zaga central que invitaba a encararla, como la que formaban Bonilla y Luiz Alberto. Con un hombre más tras la expulsión de Medel, River tampoco logró generar peligro real contra el arco de Boca. Los xeneizes tuvieron sus chances con Palermo y Chávez, pero tampoco pudieron anotar.
Boca encontró buenos rendimientos en la mitad de la cancha, con un Méndez que por primera vez jugó de volante central y fue una de las figuras. Con Matías Jiménez que debutó y cumplió por la izquierda y con Riquelme, que se comprometió con el partido y también se destacó. Medel aportó los goles, la defensa no pasó sobresaltos y poco más fue necesario para llevarse la victoria. Poco cambiará en la tabla de posiciones con el triunfo, pero mucho afectará el ánimo del plantel y del técnico de Boca, que vieron pasar los días con un rumor atrás de otro y conflictos latentes al por mayor. Como estaba el panorama en la previa, bien valen los festejos por la victoria.
Fue justa la victoria aunque no con total claridad. Gano por ser mas eficaz y mas ordenado, con eso le basto para ganarle a un muy fragil River. Las gallinas llegaban como podian, a los tumbos, sin ideas. Boca fue mas claro en eso, con un Roman en buen nivel y un Medel sorprendiendo. Me gusto tambien el nivel de Monzon y de Gaitan, siempre complicando por izquierda. Creo qe fue por ahi la clave de Boca para ganar
ResponderEliminarbueno saludos capo, buen blog
te espero por el mio...saludos
La verdad que jugó muy bien Mendez
ResponderEliminarya te agregue a mi lista de links, un saludo
ResponderEliminarQué diferencia de actitud xeneize ante River y ante Tigre!
ResponderEliminarDos grandes como River y Boca están en horas muy bajas , a ver si vuelven por sus fueros .
ResponderEliminarUn saludo
Coincido Javier, creo que Boca ganó con claridad. No fue un gran partido pero a River le costaba mucho todo y más allá de dos o tres llegadas no queda nada para destacar. En Boca creo estaban más claras las cosas de antemano, Riquelme tuvo una tarde inspirada y encontró en Mendez y en Medel a los socios adecuados ante un flojo partido de Palermo bien marcado y un Gaitán algo impreciso.
ResponderEliminarHubo actitud, pero hubo un estatega bien parado en la cancha que paró la pelota.
Saludos