Avram Grant, el día del perdón y las tensiones religiosas del deporte

Seguramente, en este día del perdón que hoy conmemoran los judíos del mundo, Avram Grant pasará su tiempo de ayuno y reflexión, como buena parte de los miembros de esta comunidad. Los vínculos de este entrenador israelí con su religión se reflejaron en distintos acontecimientos deportivos e incluso dentro de algunos partidos trascedentes que le tocó dirigir. Como si la tradición, la historia y la memoria se empeñaran estar siempre vigentes en el presente.

Avram Grant y futbolistas ingleses en Auschwitz
En 2012, Grant visitó al campo de concentración de Auschwitz con parte del plantel de la selección inglesa de fútbol que participaría de la Euro, el torneo que se disputó a mediados de año en Polonia y Ucrania. Ya había estado allí en 2008 junto a su esposa y sus hijas. Luego de caer con el Chelsea, en la final de la Champions League ante el Manchetser United, se alejó de los flashes y se integró a Marcha por la Vida, el viaje que se realiza anualmente por distintos lugares de Polonia para recordar a las víctimas del nazismo.

“Miras alrededor y ves todo esto: todos los zapatos, las gafas… Y piensas cómo puede un hombre hacer esto a otro hombre. Está más allá de la comprensión humana”, manifestó Grant tras la reciente visita a Auschwitz, un centro ubicado 43 kilómetros al oeste de Cracovia, en Polonia. A su alrededor, estrellas como Wayne Rooney, Joe Hart, Phil Jagielka, Leihgton Baines, Theo Walcott, Jack Butland, Andy Carroll y el entrenador Roy Hodgson todavía lucían conmovidos. “Es irreal. En la escuela nos explicaron la historia, pero nunca te puedes llegar a imaginar algo de este calibre”, comentó Walcott. Futbolistas de Alemania, Italia y Holanda también visitaron el lugar poco antes de la Euro.

Avram Grant perdió 15 en Auschwitz - Birkenau, el mayor centro de exterminio de la historia del nazismo, donde murieron 1,3 millones de personas durante la Segunda Guerra Mundial. Su familia llegó a Israel tras pasar por Polonia y Siberia, mientras escapa de la persecución nazi. En la huida, su padre Meir sufrió temperaturas de 40 grados bajo cero con escasa comida. Luego, morirían sus padres y sus cinco hermanos. Pero Meir pudo sobrevivir. Tras el final de la guerra, con 15 años, regresó a Polonia y luego partió hacia Israel para formar su familia.

Avram Grant con su familia en el campo de Auschwitz
En 2008, cuando Grant llegó a Auschwitz, su vida deportiva atravesaba los días posteriores a la derrota. “Hace cuatro años, fuimos mejores que el Manchester United, pero perdimos” declaró recientemente tras la victoria del Chelsea en la final de la Champions League 2012, ante el Bayern Múnich. Hace cuatro años, en la misma instancia, los penales favorecieron a los Diablos Rojos y le negaron el triunfo más importante de su vida. En aquel encuentro disputado en Moscú, Grant salió a la cancha con un brazalete negro en recuerdo de las víctimas de la Segunda Guerra Mundial. “Aquel día era víspera de Iom Hashoa, la fecha que recuerda a los muertos del nazismo, una fecha que yo siempre respeto. Pero justamente esa noche se jugaba un partido que quizás haya sido el más importante en la historia de Chelsea. Yo sentí que debía al menos llevar el brazalete negro en memoria de los muertos” declaró después.

En 2012, Grant acompañó al plantel de Inglaterra en Auschwitz mientras entrenaba al Partizán de Belgrado. En febrero de 2012, su nacionalidad y su religión le habían traído consecuencias deportivas. Según reveló entonces Grant, el Sepahan Isfahan, un equipo de la primera división del fútbol iraní, había cancelado un encuentro amistoso que se disputaría en Turquía por su condición de judío israelí. El entrenador calificó la decisión como "vergonzosa".

Aquel encuentro frustrado reflejó las tensas relaciones de israelíes e iraníes en los últimos meses. Israel acusa a Irán de desarrollar armas nucleares y dar apoyo activo a grupos terroristas. Por su parte, Irán no reconoce a Israel como nación y las especulaciones indican que podría llegar un ataque aéreo desde Teherán hacia Jerusalén.

La arena deportiva reflejó estas tensiones políticas, no sólo en el caso de Avram Grant y el Partizán. Irán negó hace un tiempo a sus deportistas la posibilidad de participar en competencias deportivas junto a atletas israelíes.

En los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, el judoca Arash Miresmaeili, abanderado de la delegación iraní y candidato a la medalla de oro en su categoría, no dio el peso necesario antes de enfrentar al israelí Ehud Vaks y fue descalificado. Medios iraníes reprodujeron declaraciones de Miresmaeili, donde afirmaba que se había negado a enfrentar a Vaks en solidaridad con los "oprimidos" del pueblo palestino. Un portavoz del Comité Olímpico de Irán afirmó entonces que era una "política general" del país abstenerse de competir contra atletas israelíes y que Miresmaeili simplemente había respetado el protocolo.

Avram Grant, presentado como entrenador del Partizán
En 2011, el nadador Mohammed Alirezaei se retiró del Campeonato del Mundo de Shangai tras negarse a disputar una prueba donde participaba el israelí Gal Nevo. Alirezaei ya se había negado a competir con el nadador israelí Tom Beeri en Beijing en 2008.Los atletas israelíes sufrieron episodios similares en los últimos años en básquet, tenis, judo, fútbol, lucha, esgrima, vóley y taekwondo.

Además de frustrado encuentro ante el Sepahan Isfahan, en enero, el Partizán de Avram Grant debió cancelar su preparación en Dubai ante el Azkals de Filipinas ya que Emiratos Árabes le negó la visa a su entrenador por su nacionalidad. Pero los contratiempos no impidieron que Grant consiguiera el título de liga con el Partizán, aunque en mayo se marchó del equipo por motivos personales.

Seguramente, el recuerdo del horror de la Segunda Guerra, la memoria de los que ya no están y las caminatas por Auschwitz colocan las competiciones deportivas en su justo lugar. En pensará en este Yom Kipur, el día descanso y reflexión para los judíos.


Aquí la visita de Avram Grant y la selección inglesa de fútbol al campo de concentración de Auschwitz:

Las lecciones de la masacre de Hillsborough




Cuando camines a través de la tormenta,
Mantén la cabeza alta,
Y no temas por la oscuridad;
Al final de la tormenta encontrarás la luz del sol
Y la dulce y plateada canción de una alondra.





Las estrofas de “You'll never walk alone", el himno oficial del Liverpool, sonaron como homenaje a los hinchas fallecidos en el acto realizado en el Ayuntamiento de la ciudad el pasado jueves. Veintitrés años después de la llamada tragedia de Hillsborough, donde murieron 96 fanáticos del Liverpool, un informe elaborado por una comisión independiente reveló nuevos datos sobre los hechos.

Los archivos desclasificados y una profunda investigación dieron vuelta la historia. Verdades de entonces que se transformaron en mentiras, certezas hechas pedazos por datos reveladores, operaciones desenmascaradas que transformaron la tragedia en una masacre, con nombres propios en la lista de responsables. “Las familias han creído, durante mucho tiempo que hubo un intento de las autoridades por tergiversar lo que pasó. Tenían razón”, explicó el propio David Cameron, Primer Ministro inglés, en la Cámara de los Comunes, mientras ofreció disculpas públicas en nombre del Estado.

Los persistentes reclamos de los familiares, que juntaron 140 mil firmas, permitieron que los archivos se muestren públicamente antes de los 30 años que establecen las leyes británicas. Los 400 mil documentos dados a conocer refutaron las principales hipótesis que circularon en 1989: los hinchas no fueron los causantes de la tragedia y los fanáticos fueron atacados deliberadamente en una campaña que incluyó a policías, dirigentes políticos y medios de comunicación. Por el contrario, los documentos demostraron que hubo un fallo de seguridad en el control de acceso al estadio, que causaría la tragedia, y que los ineficientes servicios de emergencia podrían haber salvado la vida de casi la mitad de las víctimas.

Campañas

Sigue a través del viento,
Sigue a través de la lluvia,
Aunque tus sueños se rompan en pedazos.
Camina, camina, con esperanza en tu corazón

(Fragmento de “You'll never walk alone")

En 1989, en la semifinal de Copa FA entre el Liverpool y el Nottingham Forest, disputada en el estadio del Sheffield, 3.000 hinchas de los Reds ingresaron en una zona habilitada para 1.600, con el objetivo de evitar incidentes afuera del estadio. Sólo se habilitaron dos puertas para la evacuación. Los fanáticos se agolparon contra las altas vallas, mientras la policía reprimía cualquier intento de escape. El oficial a cargo solicitó abrir las puertas de emergencia y permitir que los hinchas saltaran al campo, pero el permiso le fue negado. Paradojas de la historia, aquella tragedia no fue causada por la falta de control sino por su exceso.

Finalmente, 96 hinchas murieron por asfixia o paro cardíaco, todos aplastados contra el vallado. Hubo además 766 heridos y miles de fanáticos continuaron con tratamiento psicológico.

La portada de The Sun tras los hechos de 1989
El diario sensacionalista The Sun fue el más fiel a la versión oficial de los hechos, que cargó sobre los hinchas las responsabilidades de la masacre. Un artículo titulado “La verdad”, a cargo del editor Kelvin McKenzie, acusó a los fanáticos de robar dinero de las víctimas, de orinar sobre los policías que intentaban rescatar a los heridos e incluso de golpear a los agentes que realizaban respiración boca a boca. Entonces, MacKenzie fue advertido por sus propios periodistas y fotógrafos de que aquéllo no era cierto, pero igual siguió adelante. Incluso presentó testimonios de policías que corroboraban esas versiones.

La operación se completó con el uso del lenguaje militar en torno a los hinchas del Liverpool, presentados entonces como ejércitos violentos o, simplemente, bestias y salvajes, que debían ser tratados como tales por las fuerzas de seguridad.

Los fallos judiciales posteriores se inscribieron en la misma dirección que los discursos periodísticos. El tribunal de Sheffield que investigó el caso determinó que las muertes habían sida accidentales. El jefe de policía, David Duckenfield, no recibió castigo alguno y se retiró a los 46 años por prescripción médica. Los familiares de las víctimas sólo recibieron en compensación los gastos de los funerales. Sin embargo, 14 oficiales "traumatizados" cobraron 1,2 millones de libras. El caso se reabrió en 1997, pero las conclusiones fueron similares.

Nuevas verdades

El reciente informe no sólo echa luz sobre las fallas de los distintos protagonistas antes y después de la masacre. Además, expone a los distintos actores que intervienen en la cuestión de las prácticas violentas en los espectáculos deportivos: los hinchas, las fuerzas de seguridad, los dirigentes deportivos, los dirigentes políticos, la justicia, los medios de comunicación. Cada uno, desde su lugar, contribuye (o no) a generar acontecimientos deportivos seguros, donde la participación de los espectadores resulte placentera y confortable. Cuando todas los actores fallan, surge la muerte. 

El Primer Ministro británico, David Cameron, en la Cámara de los Comunes
Según los nuevos datos sobre los hechos de Hillsborough, 41 de los 96 fallecidos tenían posibilidades de sobrevivir con una asistencia médica eficiente. Las comunicaciones entre todos los servicios de emergencia fueron imprecisas, lo que retrasó el procedimiento. El estadio no estaba en condiciones de recibir el partido y las autoridades lo sabían. 116 de las 164 declaraciones fueron modificadas para evitar los comentarios negativos sobre la policía. “Ahora tenemos pruebas de cómo fallaron las autoridades”, reconoció Cameron, quien agregó que no existen hechos concretos para acusar a los hinchas del Liverpool como responsables de la tragedia.

La semana pasada, tras el nuevo informe, Kelvin McKenzie pidió disculpas por las crónicas de entonces. Incluso un diputado laborista solicitó la renuncia a la orden de caballero de Sir Irvine Patnick, citado como una de las fuentes de la información publicada por los medios. Las disculpas incluyeron al actual editor de The Sun, Dominic Mohan; al Sheffield Wednesday, el estadio donde ocurrió la masacre; y a las autoridades policiales. Los familiares pidieron una nueva investigación judicial sobre los hechos. "Hoy nos enteramos de la verdad. La justicia comienza mañana” dijo Trevor Hicks, con dos hijas muertas en Hillsborough.

Un nuevo fútbol

El estadio del Liverpool tras la muerte de los fanáticos
Las muertes de Hillsborough fueron un mojón determinante en la historia del fútbol mundial. Así como Inglaterra definió el deporte moderno en el siglo XIX, los cambios ocurridos en el espectáculo futbolístico a partir de 1989 definieron la industria deportiva del siglo XXI.

A partir de entonces, las vallas desaparecieron de buena parte de los estadios y la mayoría de los espectadores debieron sentarse en sus butacas. Las canchas inglesas fueron modernizadas y las entradas se volvieron mucho más costosas, lo que alejó a los jóvenes del espectáculo. Los hooligans fueron férreamente perseguidos y el estadio se convirtió en un espacio de confort. El fútbol se incorporó definitivamente a la industria del espectáculo, con un nuevo público en las gradas. Como escribió el periodista español Santiago Segurola, Hillsborough “fue el final del fútbol como una ceremonia tribal destinada a satisfacer el ocio de la clase obrera”.

En este nuevo espectáculo, al menos en estos días, la pelota se disparó para el lado de la justicia. Hoy, los familiares pueden escuchar un poco más satisfechos el final de la canción insigna del club que amaban los que ya no están:

Y nunca caminarás solo,
Nunca caminarás solo.
Camina, camina, con esperanza en tu corazón,
Y nunca caminarás solo,
Nunca caminarás solo.


Aquí un informe sobre la masacre de Hillsborough del programa español "Fiebre Maldini", de Canal +:  

Shevchenko deja el fútbol e inicia su carrera política

Shevchenko celebra ante Suecia en la Euro 2012
Fue en el Estadio Olímpico de Kiev donde empezó y terminó todo para Andriy Shevchenko. Los dos tanto que le anotó a Suecia con la camiseta de Ucrania, en la Euro 2012, fueron su despedida de las redes para siempre. Fue allí, sobre el césped donde vivió su primera gloria futbolística y en el país que lo adoptó como ídolo nacional. Tras aquel triunfo en el debut del torneo continental, el equipo ucraniano cayó ante Francia e Inglaterra y se despidió del torneo que lo tenía como anfitrión junto a Polonia. Tras la eliminación, Shevchenko anunció sorpresivamente su retiro del fútbol y el salto a la carrera política.

Las armas y los goles. Sheva abandona el fútbol luego de 18 años de carrera, con un récord impresionante de 321 goles en 648 partidos (casi un tanto cada dos encuentros a lo largo de 18 años). Nació en Dvirkivshchyna, una población cercana a Chernobyl, en una familia que debió huir a la costa del mar de Azov luego de la explosión de la planta nuclear en 1986. Más tarde, su familia siguió a su padre militar, quien fue trasladado a Kiev. A Andriy le esperaba lo esperaba un futuro castrense según el mandato paterno. Mientras tanto, convenció a su familia de tomar al fútbol como una buena forma de ponerse a punto físicamente antes de tomar las armas. Tras ser rechazado en la Universidad de Kiev para la carrera de educación física, pasó la prueba en el Dínamo de Kiev y comenzó su carrera deportiva.

Tras su paso exitoso por el Dínamo, con 11 títulos en 5 años, pasó al Milan, donde alcanzó la gloria al ganar la Liga de Campeones y el campeonato de la Serie A. Luego le siguió un paso opaco por el Chelsea inglés, con varias lesiones, y le despedida en el Dinamo, el club que lo había visto nacer.

Shevchenko político. Bajo el régimen de la Unión Soviética, todos los equipos controlados y financiados por la KGB (el servicio secreto) pasaron llamarse Dínamo. Nacieron así equipos con ese nombre en Bucarest, Berlín, Dresde y Kiev, entre otros lugares.

Tras la caída de la URSS, el Dínamo de Kiev apoyó públicamente al Partido Socialdemócrata de Ucrania. En esa sintonía, antes de las elecciones de 2004, Shevchenko dio su respaldo al candidato Víktor Yanukóvich, quien proponía un acercamiento a Moscú y una mayor distancia de occidente. Pero aquellos comicios culminaron con un masivo fraude a favor de Yanukóvich, que provocaron la llamada “Revolución Naranja”, una serie de marchas y huelgas en reclamo de comicios transparentes. El goleador luego se retractó de su respaldo público. El Tribunal Supremo revocaría las elecciones, que se realizaron nuevamente, con el triunfo del líder prooccidental Víktor Yushchenko.

Shevchenko saluda a Natalia Korolevska, líder del partido "Arriba Ucrania" 
Pero desde 2010, Yanukóvich es el presidente del país. El 28 de octubre próximo, Shevchenko será el segundo en la lista de candidatos a diputados del partido "Arriba Ucrania", una agrupación opositora al actual mandatario. "Arriba Ucrania" ha reclamado recientemente por la liberación de Yulia Tymoschenko, la dirigente política que permanece en la cárcel y fue objeto de múltiples campañas a favor de su liberación durante la reciente Euro 2012.

El final y el principio. Una palomita precisa y un anticipo tras un córner que terminaron en la red lo mostraron vital y ágil ante Suecia en la Euro, como en toda su carrera. Allí, en el Estadio Olímpico de Kiev que lo vio nacer deportivamente, Andriy Shevchenko dejó su sello para que su calidad y su estirpe goleadora permanezcan para siempre. Se retiró convertido en el máximo ícono mundial de Ucrania. Ahora deberá revalidar títulos, esta vez en la carrera política.

Aquí los goles de Andriy Shevchenko a Suecia en la Euro 2012:


La caída del Glasgow Rangers, el coloso escocés

No es común que el equipo más importante de un país deje existir. Aquellas frases que asignan a la pasión y los colores su trascendencia a la eternidad muchas veces no reparan en que los clubes están manejados por hombres y deben atenerse a reglas y procedimientos legales para poder seguir su camino. El fanatismo y el amor de los hinchas del Glasgow Rangers de Escocia, uno de los clubes más grandes del Reino Unido, no pudo evitar la desaparición de la institución, hoy reciclada en el Rangers Football Club, que jugará en la Third Division, la cuarta categoría del fútbol escocés.

La HMRC (Agencia Tributaria del Reino Unido) fue quien dio el golpe de suerte de este club con 139 años de historia y 54 Ligas nacionales. El fisco reclamaba 26 millones de euros por impuestos impagos, que se sumaron a los 135 millones adeudados en total, para decretar la quiebra del Glasgow Rangers.

El magnate David Murray es un poderoso empresario escocés que hizo su fortuna con negocios en la minería y la construcción, al punto de haber sido nombrado Caballero del Imperio Británico. En 1988, Murray adquirió las acciones del club a cambio de 6 millones de libras. Un año más tarde se hizo con los servicios del delantero Maurice Johnston, el primer jugador católico en la historia del club, históricamente asociado a los protestantes. La jugada de marketing causó gran revuelo, pero no dio los resultados esperados, ya que el goleador duró tan sólo una temporada con la camiseta azul. "Por cada cinco libras que gaste el Celtic, nosotros gastaremos diez" dijo alguna vez Murray a la prensa, en referencia a la competencia con clásico rival, ligado al catolicismo.

La administración Murray planeó un fideicomiso en un paraíso fiscal, donde futbolistas, entrenadores, directivos y empleados aportaban parte de sus ganancias y recibían salarios en forma de reparto de beneficios. Se calcula que el Rangers movió dineros bajo este mecanismo por 47 millones de libras, sin aportar los impuestos correspondientes al fisco británico. La agencia tributaria inició entonces una demanda contra el club, en reclamo de los pagos atrasados.

En 2011, en medio de balances en rojo y demandas, Murray vendió el 85 % de las acciones a Craig Whyte. El traspaso se realizó a cambio de una libra, que se sumó a la deuda de 18 millones de euros que el club tenía con el Lloyd´s Banking Group por diversos préstamos. Sin embargo, el joven empresario de 40 años no pareció ser el mejor piloto de tormentas.

Un reciente informe de la BBC demostró que pesaba sobre Whyte una resolución judicial que le impedía estar al frente de cualquier empresa en el Reino Unido, luego de la desaparición de 24 emprendimientos propios que incluyeron balances espurios y ventas de acciones con información falsa.

A comienzos de 2012, Whyte se presentó en los tribunales para pedir el concurso de acreedores y un grupo de administradores externos se hizo cargo de la institución. Automáticamente, la federación escocesa le restó 10 puntos al Rangers en la clasificación, lo que lo dejó a 14 unidades del Celtic, que a finalmente se llevaría el título de liga. Mientras tanto, el club se veía obligado a desprenderse de sus mejores futbolistas y la federación le prohibía incorporar otros nuevos. Además, Whyte fue suspendido de por vida para ocupar cargos en el fútbol escocés.

Uno de los goles del Rangers en su debut en la cuarta división
Finalmente, la justicia rechazó el plan propuesto por el club para afrontar las deudas con el fisco y decretó la quiebra de la institución en junio pasado. Entonces, el Rangers ya había cambiado de manos. El empresario británico Charles Green se había quedado con las acciones pocos días antes, a cambio de 7 millones de euros. Inicialmente, su propuesta incluía un cambio de nombre, para que el equipo pudiera seguir participando en la máxima categoría del fútbol de Escocia. Pero el plan tampoco fue aceptado. El 13 julio, 25 de los 30 clubes de laScottish Premier League votaron en contra y obligaron al equipo a jugar en cuarta división.

“Lo que habéis transmitido al Rangers es un testimonio de pasión, lealtad y amor por estos colores", fue el mensaje de Green a los fanáticos en el primer partido como local del equipo en la Third División. Más de 49 mil aficionados llenaron las tribunas del estadio Ibrox para ver la victoria del Rangers Football Club por 5 a 1 ante el East Stirling.

El equipo heredó el estadio, las instalaciones de entrenamiento de Murray Park y la pasión de los miles de fanáticos, que no fue suficiente para evitar la caída. Administradores incapaces, negocios fallidos y negociados dibujan la parábola de la caída del Rangers. Ahora, en la cuarta
división, no le quedará más remedio que subir.

Aquí los goles del Rangers Football Club ante el East Stirling, en el debut del equipo de Glasgow en la Third Division: