La sortija andaba dando vueltas y a alguno le iba a tocar. Aunque, en este caso, no se trata de una vuelta más en la calesita, sino de un boleto de salida. En estas 7 fechas del torneo fueron varios los técnicos cuestionados, que convivían con el fantasma del despido, pero el desafortunado fue Daniel Garnero, entrenador de Independiente, quien tras la derrota por 4 a 0 ante Banfield ayer abandonó su puesto. Se fue con 3 puntos en su haber sobre 21, sin ninguna victoria y con su equipo en el último lugar de la tabla.
Independiente hizo cambios drásticos de gestión antes del comienzo de temporada. Pese a que había estado en la pelea por el campeonato hasta el final, dio salida a su entrenador Américo Gallego y a jugadores de peso como Nuñez, Acevedo, Gandín y Piatti, con la intensión de promover a jóvenes valores como Rodríguez, Fredes, Godoy y Galeano. El plan dirigencial hasta ahora no funcionó, aunque tampoco se pueden sacar conclusiones terminantes tras dos meses.
En un fútbol inmediato y urgente, un espejo para mirarse es All Boys, recién ascendido a Primera División, que ayer le ganó por 2 a 1 a Estudiantes y consiguió su tercera victoria en el torneo. El Albo cuenta en el banco con José “Pepe” Romero como entrenador, quien llegó a ese lugar hace más de tres años y aún permanece allí, en una continuidad infrecuente en Argentina.
Romero trabajaba en las inferiores de All Boys y como preceptor en una escuela de Caseros. En 2007, reemplazó a Néstor Ferraresi cuando el equipo deambulaba por la Primera B, la tercera categoría del fútbol argentino. Al año siguiente consiguió al ascenso al Nacional B y, tras dos años allí, venció en la Promoción a Rosario Central y llegó a Primera. Este campeonato arrancó con dos derrotas ante Racing y Vélez, pero en la tercera fecha se llevó una victoria frente a Boca y pareció encontrar el camino. Derrota ante San Lorenzo, victoria ante Olimpo, parda ante Colón en Santa Fe y tres puntos ante el candidato Estudiantes. Buena cosecha para un equipo que además de su técnico conserva a muchos de los jugadores que le dieron el ascenso, como Cambiasso, Soto, Vella, Fernando Sánchez, Pérez García y Matos.
El sábado, el recién ascendido Quilmes enfrentó al último campeón Argentinos. El Cervecero todavía no ganó en el torneo, tras renovar su plantel con 20 jugadores nuevos. El Bicho vio partir en el receso a jugadores fundamentales que le dieron el último título, como Sosa, Coria, Calderón, Caruzzo, Canuto y Raymonda. Tampoco ganó en el torneo. Fue empate 2 a 2, una auténtica proeza para Quilmes que jugó parte del segundo tiempo con dos jugadores menos. Pero la realidad mostró a dos equipos en bajo nivel, intentando armar un rompecabezas que les dé alguna victoria. Tarea difícil en medio de tanta urgencia.
¿Y el proyecto de Independiente? ¡Cuánto verso! Los clubes están pagando la irresponsabilidad de haberse convertido en quiosquitos de compra y venta de jugadores para beneficio de dirigentes e intermediarios. ¿Cómo le hubiera ido a este All Boys o a este Banfield con el Independiente de la década del 60 o 70? El nivel actual es paupérrimo. Como decía Panzeri "El fútbol es el jugador", y los jugadores que tenemos en el torneo...¡mamita!
ResponderEliminarAll Boys, es uno de los equipos más parejos del torneo y por momentos juega muy bien. No mereció perder ni con San Lorenzo, y menos con Racing en la primera fecha. Creo que le puede ir bien en esta primera temporada.
ResponderEliminarQué golazo el de Grazzini.
Saludos