“Corresponde señalar que el equipo argentino expuso en Inglaterra un juego discreto y estuvo lejos de alcanzar los objetivos previstos. Sin embargo, sobre la base de una campaña manipuladora fomentada en gran medida por los medios de comunicación, y determinadas circunstancias que desbordaron el hecho deportivo en sí, los jugadores fueron recibidos como héroes” señala el sociólogo Roberto Di Giano en su nuevo libro “Fútbol, poder y discriminación social” sobre el papel de la Selección Argentina en el Mundial de Inglaterra ´66. Este apartado sintetiza bien uno de los objetos de la obra: romper, o al menos revisar, ciertas creencias populares en torno al fútbol argentino y ciertos discursos instalados desde hace tiempo. Tras la Copa del Mundo de 1966, a aquellos futbolistas argentinos se les otorgó el título de “campeones morales” y hasta fueron recibidos por el dictador Juan Carlos Onganía. Sin embargo, lejos habían estado de mostrar un fútbol vistoso.
Di Giano nos muestra que estas acusaciones cruzadas entre jugadores, entrenadores, dirigentes y la influencia de los medios de comunicación y el poder político en el mundo futbolístico que tanto aparecen en estos días en torno a Maradona y la Selección Argentina se han repetido en distintas ocasiones a lo largo de la historia. Por eso es necesario revisar, analizar y reflexionar, como bien lo hace el autor, sobre ciertos acontecimientos en torno al fútbol argentino porque allí se revela una comprensión del país donde tiene lugar.
Así, desfilan las críticas del diario La Nación a comienzos del siglo XX a los nuevos cracks surgidos de los sectores más bajos, los festejos de las clases populares argentinas y uruguayas en las décadas de 1920 y 1930 tras los éxitos deportivos, los dirigentes políticos de los años ´30 vinculándose a los clubes de fútbol para ganar popularidad, el apoyo del estado argentino para el desarrollo de la actividad en esos tiempos, el papel de la revista El Gráfico en la divulgación de la llamada “modernización” del fútbol argentino luego de la derrota en el Mundial de Suecia en 1958, el abandono del estilo argentino y la llegada del modelo europeo, el papel del técnico César Luis Menotti en la década del ´70, la influencia de la dictadura militar, el recibimiento popular masivo tras el Mundial ´90 y la adicción tan argentina a crear mitos populares para adorarlos, analizarlos e intentar destruirlos.
En estos días, el fútbol argentino presenta en los primeros planos declaraciones públicas cruzadas entre el técnico de la Selección, los dirigentes, el secretario de selecciones, la Presidenta de la Nación y un sector importante del periodismo. La Asociación del Fútbol Argentino mantiene un contrato televisivo con el Estado Nacional, vuelto hoy el principal sostén de la economía de los clubes. Los medios de comunicación ligados al deporte han alcanzado un grado de desarrollo nunca antes visto, con infinitas horas que se reparten entre reportajes a los protagonistas y polémicas entre panelistas. En este contexto, es fundamental la tarea de Di Giano, que consiste en parar la pelota, revisar la historia y discutir eso que llamamos fútbol argentino. Quizás, algún día, podamos sentirnos orgulloso de tener un fútbol mejor.
Muy bueno el blog, te dejo el mio
ResponderEliminarwww.futbolparaentendidos.wordpress.com
Nos leemos, saludos.
Gran articulo, te interesa un intercambio de enlaces. El mio es http://caviardefutbol.blogspot.com/ responde en mi blog
ResponderEliminarComo libro de fútbol, te recomiendo "Me gusta el fútbol" de Cruyff, es LA biblia del fútbol.
ResponderEliminarYa puse tu enlace en mi blog, saludos.